La tarjeta es un documento mediante el cual se acreditan, entre otros datos, los siguientes: la formación recibida por el trabajador del sector en materia de prevención de riesgos laborales;su categoría profesional; y sus periodos de ocupación en las distintas empresas en las que haya ejercido su actividad.
Poseer la Tarjeta Profesional de la Construcción tiene numerosas ventajas, tanto para los trabajadores, como para las empresas.
Con la posesión de la TPC se certifica que los trabajadores poseen, como mínimo, una formación inicial en materia de prevención de riesgos laborales. Asimismo, esta certificación es extensiva para los trabajadores de nueva incorporación, así como para aquéllos que pertenecen a las empresas subcontratistas.